(*) Por Roberto Colmenarejo
“El mundo entero tiene más o menos tres vasos de vino de retraso” (Humprey Bogart).
Cada tres meses aproximadamente, disfruto muchísimo preparando estas notas sobre los vinos baratos y cumplidores que he probado en el último tiempo. Cuando las escribo, siempre pienso en la gente que consume vino todos los días como parte de sus comidas y que desea vinos agradables de beber a precios razonables.
Soy conciente de que las formas de consumo han cambiado mucho en los últimos años, pero estoy absolutamente convencido de que el vino sigue siendo el compañero más noble de los alimentos, siempre y cuando se lo beba con moderación, claro está.
Me enorgullece mucho que nuestra industria vinícola nacional -de la que formo parte por mi oficio- ofrezca productos de buena calidad y precio acomodado, permitiendo así que todos podamos acceder al placer de una rica copa de vino.
Para recuperar la tradición de la botella en la mesa, aquí 13 vinos para todos los días:
Toro Rosado S/A ($12): Cuando uno compra un vino tan barato, las expectativas son pocas. Sin embargo, este gran clásico de la mesa argentina se “defiende” bastante bien. Es un rosado simple y etéreo; de aromas frutales, agradable acidez y paso de boca seco. ¿Qué más se puede pedir por 12 pesos?
Cornejo Costas Altitud Torrontés 2012 ($28): Un vino quizás poco conocido por aquí, pero bastante famoso en su Salta natal. Un torrontés rico, bien hecho y de precio acotado, que se bebe con mucha facilidad. Ofrece aromas florales y de uvas maduras; acompañados de una boca liviana, fresca, de bajo tenor alcohólico y sutil amarguito final. ¡Genial para maridar con unas empanadas salteñas picantes y cuidar el bolsillo!
Los Pasos Chardonnay-Semillón 2012 ($32): Ya he recomendado esta línea de vinos en alguna otra oportunidad, pues su relación precio-calidad es inmejorable. Un blanco de corte que ofrece agradables aromas de perfil frutal, meloso y levemente herbáceo. En la boca tiene cuerpo medio, paso veloz, fresca acidez y persistencia moderada. ¡Rico vino para el consumo frecuente; pues armonizará con una amplia variedad de platos!
Latitud 33 Sauvignon Blanc 2012 ($38): A veces, por buscar novedades, uno deja los clásicos medios olvidados. Me paso con este vino de bodegas Chandon, que probé de casualidad en el cumpleaños de un amigo. Un blanco fragante y liviano, de esos que le gustan a todo el mundo. Tiene notables aromas tropicales (mango, maracuyá), cítricos y herbales; en la boca es sabroso, de refrescante acidez y con buena persistencia. ¡Si haces paella o pollo al disco, seguro caerán varias botellas de este blanco!
Giagnoni Bonarda 2011 ($21): Un vino poco conocido por aquí, pero que sorprende por sus buenos atributos y precio económico. Está elaborado por una cooperativa del Este Mendocino, región tradicional para el cultivo de la variedad Bonarda. El vino en cuestión tiene aromática frutal simple y directa; con boca ligera y agradable, sumamente fluida y de taninos apenas rugosos. ¡Nada mal por 20 mangos!
Gran Rodas Bonarda Argentina-Malbec 2012 ($23,50): La clásica bodega Esmeralda elabora este vino simple y bien al gusto argentino, con un corte de nuestras dos uvas emblemáticas. Un tinto fresco, de sabores vinosos y frutados maduros; que entra ligero en boca, con buena acidez, paso franco y taninos dóciles. ¡Para regar una choripaneada informal con amigos!
Finca La Escondida Cabernet Sauvignon Roble 2012 ($30): Un vino que ofrece más de lo que pide por su precio. Un tinto con buena tipicidad varietal; que se percibe en la nariz con notas de frutas negras y especias, más algunas suaves pinceladas de vainilla aportados por el contacto con roble. En la boca es ligero, con sensaciones frutales, paso franco y taninos apenas secantes. ¡Para asados multitudinarios, sin pagar de más!
Trapiche Alaris Pinot Noir 2012 ($31): No es fácil encontrar la tipicidad varietal de esta uva en un ejemplar tan económico; sin embargo este vino de la Bodega Trapiche es un buen acercamiento al cepaje. En la copa es un tinto de intensidad colorante baja, casi un rosado. En nariz ofrece aromas frutales simples y directos, con leves trazos herbales. En boca es fluido y casi incorpóreo, con acidez balanceada, taninos imperceptibles y persistencia corta. ¡Buena botella para disfrutar del primer contacto con la cepa!
Cafayate Cabernet Sauvignon 2013 ($32): ¡Que rico son los tintos jóvenes y livianos, cuando recién salen al mercado! Este es un clásico Cabernet Sauvignon de Cafayate, con la tipicidad varietal y regional “a flor de piel”, a pesar de pertenecer a un segmento bajo de precios. Un vino con nariz frutal madura, piracínica -ají verde-, especiada y algo terrosa. En la boca tiene cuerpo medio, paso ágil, buena acidez y taninos ligeramente astringentes, que no llegan a molestar. ¡Salteño rendidor, ideal para la picadita!
Don Silvestre Malbec 2012 ($34): El Valle de Uco (Mendoza) ofrece cada vez mejores vinos, siempre muy frescos y bebibles, como este Malbec de la bodega Hinojosa. Un tinto juvenil y delgado, de perfil frutado maduro. En la boca es simple, de paso veloz, taninos suaves y breve persistencia. ¡Para acompañar unas milanesas con puré!
Marcus Merlot 2012 ($37): Un Merlot patagónico de precio accesible, al que sigo hace varios años. Elaborado por la centenaria bodega Humberto Canale en la zona de Gral. Roca (Alto Valle de Río Negro), es un tinto suave y ligero. De aromas frutales y toques herbáceos; tiene una boca delgada y austera, con buena acidez y leve sensación tánica. ¡Un vino que “cumple siempre”, para ofrecer en las reuniones familiares domingueras!
Dilema Dulce Natural Rosado 2013 ($26): No podía faltar un vino para los golosos en esta selección. Esta es la última novedad de la bodega Estancia Mendoza; un rosado dulzón elaborado con un corte de uvas Chardonnay, Sauvignon Blanc y Malbec. Tiene aromas directos de frutas frescas (frambuesas); que se complementan con una boca frutada, bastante dulce, de acidez justa y baja graduación alcohólica. ¡Parar beber muy frío, en la primera copa del aperitivo!
Finca Natalina Extra Brut S/A ($40): Esta línea de vinos sanjuaninos suele aparecer con frecuencia en mis notas, pues ofrece productos muy satisfactorios por el módico precio que se paga por ellos. Este vino burbujeante de la marca no es la excepción, de limpios aromas frutales (ananá, pera, cítricos); con boca sabrosa pero sutil, de fresca acidez y burbujas cosquilleantes. Realmente no es fácil encontrar vinos espumosos de correcta calidad en segmentos de precio tan bajos, así que este producto es un verdadero hallazgo. ¡Para que los brindis nunca se detengan por falta de presupuesto!
¿Y para ustedes, cuáles son sus vinos de todos los días?
Si están en la búsqueda de más vinos económicos, no dejen de leer: Doce vinos para pasar el invierno, Once vinos pos vacaciones, Quince vinos BBB o Vinos con poca plata.
(*)Sommelier y docente – robertocolmenarejo@hotmail.com
Preguntá en Goulu y en Catar SRL por estos vinos recomendados.