La 14a edición de la Feria Caminos y Sabores 2018 fue visitada por 90 mil personas en cuatro días. Contó con la participación de más de 400 expositores de diferentes provincias. Fuimos invitados a recorrerla y allí encontramos algunas perlas que te vamos a recomendar en esta nota.
Sin dudas es la feria gastronómica más importante del país. La cantidad de gente que entraba era de no creer. Todos los porteños querían salir de sus casas para ver qué había de nuevo entre los productores de alimentos a nivel país. Y no sólo eso, porque entre otras cosas se pueden presenciar clases de cocina de los representantes de cada provincia, porque esta feria es eso, es una gran vidriera para que las provincias muestren sus sabores típicos.
Quesos, fiambres, conservas dulces y saladas, panes, chocolates, aceites, licores, embutidos. La feria es gigante y tiene una gran diversidad de propuestas, todas bien ordenadas según diversas categorías.
Tres perlitas
Recorriendo sus instalaciones vemos que hay un grueso importante de puestos de quesos y fiambres, que no representan a una zona geográfica en particular sino que son feriantes que recorren el país comercializando productos que provienen en su mayoría de la provincia de Buenos Aires. Quesos y fiambres brillan en sus pintorescos puestos de madera. Y sobre todo, llaman la atención unas costillas de cerdo ahumadas, que cuelgan como helechos. Las puesteras invitan a acercarse y a probar. Y al que le gusta mucho, compra.
Costillas de cerdo ahumadas.
Otro productos que nos llamó mucho la atención fue un vodka producido en Río Negro, más precisamente en Cipoletti. Se llama Nuctúa y se elabora con un alcohol tridestilado en su estilo clásico y con un cuarto destilado en el caso de los saborizados con limón, jengibre y menta; cinco pimientas; o el de naranja y manzanilla, entre otros. Se trata de un alcohol de calidad. Todavía nadie lo distribuye en Córdoba, pero ya estaban en contacto con algunos aspirantes.
Vodka argentino.
Un tercer producto que nos llamó a atención fue la salmuera de Sal de Aquí, una conocida marca de sal marina de Trelew (Chubut) que ahora no sólo ofrecen las clásicas escamas sino que ante la fiebre mallmannesca por cocinar todo a la estaca desarrollaron dos salmueras saborizas. Una con ajo y tomillo silvestre y otra con merkén, un condimento elaborado en base a pimentón patagónico de tono rojizo. El agua es de la playa Cabo Raso, a 150 km de la Capital de Trelew.
Sal de Aquí.
Córdoba, muy bien representada
Por un lado, Córdoba tenía un stand con productos destacados de su gastronomía y por el otro había puestos que fueron por su cuenta o bien invitados por el algún ministerio del gobierno nacional.
En el puesto de Córdoba charlamos con el gran Martín Piazzoni, un productor de salame artesanal que es un verdadero representante de la cultura gastronómica de Colonia Caroya. Y contó que la maduración ideal para un buen salame es de por lo menos 21 días, pero llegamos a la conclusión de que si tiene por lo menos 30, es mejor.
Salames Piazzoni.
A su lado estaba otro de los productos estrella de la Colonia y de esta enorme Caminos y Sabores. La polenta blanca Puesto Viejo, una perlita que el citado Mallmann, Dolli y Narda, no dejan de utilizar en sus recetas y que en Córdoba utilizan Standard 69, Lucca, y no muchos más.
Polenta bianca.
Seguimos el recorrido (durante varias horas) y encontramos los famosos alfajores al fernet. Se hicieron conocidos en la última Delicatessen y Vinos desarrollada en el hotel Sheraton de Córdoba y ahora llegaron a Buenos Aires. Se llama Al Ferneé. Son de una fábrica de San Francisco (Oki Oki) y la verdad es que son muy buenos. Porque la galleja cruje, la cobertura de chocolate se funde cuando toma contacto con la temperatura de la boca y el fernet se hace notar cuando el dulce de leche se disuelve. Y no es invasivo, hay un equilibrio muy bien logrado. Ahí está su valor.
Alfajores al fernet.
Se elabora con fernet Beney, el fernet artesanal de Traslasierra y la verdad es que sorprendió y que es un gran regalo para los que visitan Córdoba y no quieren volver con las manos vacías.
Al lado de este puesto de alfajores nos encontramos con otro producto que nos sorprendió gratamente: pasta seca cordobesa (se llama Makarona) elaborada con harinas alternativas, como de garbanzo, arveja o lenteja, que también incluyen proteínas. Una gran sorpresa y de mucha utilidad para la comunidad celíaca, que cada día toma más protagonismo en supermercados y ferias.
Pasta Makarona.
En fin, Caminos y Sabores es una gran muestra del producto argentino. Es muy importante para que año a año estemos atentos al trabajo que se realiza en las provincias, no sólo para fomentar al goce del paladar sino también para generar nuevos emprendimientos y fuentes de trabajo relacionados a la gastronomía.