Caroline Deschamps (francesa) y su esposo Silvio Díaz (porteño), terminaron produciendo helados y dulce de leche en Córdoba después de un largo camino.
“Vine a Latinoamérica para hacer un viaje de un año entre Argentina y México, pero nunca llegué a completarlo. Me quedé a trabajar como guía a caballo durante un año en el desierto de Atacama, en el norte de Chile, y luego me fui a Buenos Aires para estudiar Cine documental, donde conocí a mi compañero”, cuenta Caroline.
Del cine y el puerto saltaron a Los Hornillos. Trabajaron como panaderos dos años y compraron un campo en Travesía (cerca de San Javier) para poner un tambo y hacer quesos. Hoy fabrican helados -que venden en San Javier y Villa Dolores- y son los responsables de uno de los mejores dulces de leche de la provincia.
También forman parte de Utuco, el proyecto para promover la identidad gastronómica cordobesa.
Así fue la charla con Caroline…
¿Cómo pasaron de la idea de los quesos a los helados y el dulce de leche?
Manpeca empezó como un emprendimiento familiar de tambo y quesos pero la vida nos llevó por otro lado. Ana Domínguez, una vecina de Travesía nos enseñó a hacer dulce de leche y empezamos a vender la leche cruda y el dulce de leche y nos fue muy bien. También vendíamos algunos quesos.
¿Y después llegó la heladería?
Unos años después surgió la posibilidad de instalar una heladería en San Javier. Cerramos el tambo y empezamos a comprar la leche de otro tambo de la zona y nos focalizamos en desarrollar este nuevo negocio.
¿Mantuvieron algo de la idea original?
Sí, siempre apuntamos a usar productos lo más frescos posibles, orgánicos o naturales. De la zona. Aprovechamos los recursos de las sierras, como yuyos, algarroba, frutas frescas y leche de tambo artesanal. Nada de conservantes ni aditivos químicos.
¿Manpeca es una heladería que vende dulce de leche o una fábrica de dulce que también hace helados?
Hoy es principalmente una heladería pero seguimos haciendo dulce de leche. En invierno vivimos de eso. Vendemos el dulce de leche en nuestro local pero también lo enviamos a otros comercios de Córdoba, Buenos Aires y otras provincias.
¿Cuántos sabores de dulce de leche tienen?
Ah, eso es divertido (risas): tenemos 12 variedades. El Tradicional, el que más sale, el famoso dulce de leche argentino, y después hay: con chocolate, con pasas maceradas en rum, con nueces, con coco rallado, con cacao amargo y avellanas, con algarroba, con café, con canela, con menta, con dulce de naranja, con cereza y almendras… Algunos los inventamos nosotros, a otros los fueron sugiriendo clientes y vecinos. Eso está bueno. Siempre tuvimos mucha colaboración de la zona.
¿Cuál es el que más se vende? ¿Cuál es el que más les gusta a ustedes? ¿Y cuál el más original o raro?
El tradicional es el que más se vende. A la gente le intrigan los otros sabores pero llevan primero el tradicional y luego algún otro. Los dos o tres que le siguen son el de chocolates, el de nuez y el de cacao amargo y avellanas, que es el que más nos gusta a nosotros. El más original es el que tiene algarroba, que le da un poco más de dulzor, pero está bueno, tiene el sabor del monte.
Cuando descubrimos esa pequeña heladería donde empezaron, camino al Champaquí, nos sorprendieron los sabores como lavanda, azafrán, maní, piquillín, aceite de oliva y almendras…
Sí, es cierto, no son comunes. Pero los que más salen son los de dulce de leche. Después, los chocolates y los del monte, como Algarroba, Cedrón y Peperina…
¿Por qué participan de Utuco?
Nos pareció una buena forma de conocer productores y gente que esté en el rubro de la gastronomía de Córdoba. Y para promover los productos que hacemos y que intentamos que tengan ese toque cordobés.
Los dulces de leche saborizados de Manpeca, próximamente en la caja La Gurmet. Conocé nuestra selección mensual de productos únicos y adquirí la caja en nuestra tienda www.circuitogastronomico.com/tienda