Cada vez que pasaban por “Las Tres Escobas”, la célebre posada del pueblo de Hogsmeade, Harry, Hermione y Ron hacían una parada obligada para tomar una cerveza de mantequilla. La saga de “Harry Potter” divide la tierra en dos: mundo mágico y “muggle”. Pero a no desesperar que en este último, nuestro mundo, también existen sabores de birra originales y excéntricos. El e-commerce CraftSociety te invita a conocerlos.
Tal vez hayas escuchado hablar de la cerveza con limón, pero ¿sabías que hay cerveza con sabor a pizza o wasabi? Sí, en una pequeña ciudad de Illionis, Estados Unidos, un restaurante decidió añadir a su receta artesanal, orégano, tomate y ajo, dando vida a una increíble birra con gusto a pizza. En Japón, no son pocos los que incluyeron en sus cervezas ingredientes típicos de su país como la planta de wasabi, e incluso hay quienes fueron por más, como la cervecería “Abashiri”, que creó la “Okhotsk Blue Draft”, una cerveza a base de ¡agua de icebergs del mar de Okhotsk! que tiene un particular color azul. En este lugar inventaron además la “Bilk”, una bebida con 70% de cerveza y 30% de leche.
En España, la empresa Cerex creó una cerveza con sabor a jamón ibérico, mientras que la compañía Mustache incorporó tomillo, frutos del bosque infusionados y hasta agua marina de las Islas Cías. Si está acá estabas impresionado, preparate para leer esto: la marca norteamericana “Hornswoggler” inventó una cerveza con gusto a galletitas Oreo. Otros sabores menos extraños pero igualmente osados son aloe vera, pimienta, azafrán y vainilla.
¿Y nuestro país? Los argentinos también tenemos sorpresas por descubrir. En CraftSociety creen que no hay límites para innovar y coinciden con el dicho popular que afirma que “en la variedad está el gusto”, por eso te acerca la oportunidad de probar, por ejemplo, la cerveza Maracuyá Sour de Peñón del Águila, que se caracteriza por su acidez y refrescancia, o la nueva birra Porter de Patagonia, que tiene notas de cacao y café, para que puedas escribir tu propia historia mágica y birrera.
