La última visita de Anthony Bourdain a la Argentina fue en enero de 2016, cuando vino a grabar un episodio dedicado a la ciudad de Buenos Aires de su programa Parts Unknown, que ya se emitía por CNN. Ese episodio estaba previsto para que fuera el cierre de la séptima temporada del programa y se lo llamó «El último tango en Buenos Aires». Sin embargo por cuestiones de programación el mismo se pasó a la siguiente temporada y se emitió en noviembre de 2016. Esta no fue la primera vez que Bourdain estuvo en la Argentina. Su primera visita había sido en 2007, cuando estuvo nueve días en distintos puntos del país, para grabar su ciclo Sin reservas, que emitía Discovery Travel & Living. En el link se puede ver el capítulo completo.
En ese capítulo de Sin reservas, que se emitió en octubre de 2007, el chef empezó su travesía en Buenos Aires, acompañado por los músicos de Los Pericos, que lo llevaron a probar comidas típicas porteñas, entre las que estaban la pizza con fainá, las empanadas y las picadas. La misma siguió por parajes patagónicos entre los que estuvieron Bariloche, El bolsón y El calafate. Allí pudo degustar asados y guisos, hechos con carne de cordero y de chancho. El toque infaltable fue la visita al glaciar Perito Moreno, donde probó el típico whisky en las rocas con hielo natural del glaciar, que se les sirve en las excursiones a los turistas.
Su visita posterior, la de 2016, fue solo a Buenos Aires (en este link se puede ver los avances) y muestra una ciudad con poca gente. Bourdain, que remarca que en esas condiciones las calles porteñas le transmiten melancolía, explica que la deserción se debe a que en verano muchos porteños de clase media y adinerados salen de vacaciones. El foco de la atención del programa estuvo puesto en la aceptación que tiene en Buenos Aires el psicoanálisis, con las altas cifras de personas que siguen tratamientos psicológicos. Como parte del programa, el chef se sometió a una sesión de diván en la que confesó, con grandes dosis de humor, sus temores y ansiedades.
Aquel viaje duró una semana y el anfitrión pudo disfrutar de carne argentina, de vaca y de cerdo y además diferentes tipos de salchichas. También compartió una comida en el restaurante Don Carlitos con su colega local Francis Mallmann y comió un sándwich de chorizo con la chef Soledad Nardelli, tomando fernet y mirando un partido de fútbol 5 entre su equipo de filmación y el de la brigada del restaurante Chila(donde trabajaba Nardelli). El episodio termina con Bourdain experimentando un paseo típico que practican muchas familias los fines de semana: ir a ver despegar y aterrizar aviones en aeroparque.
Siempre así. Original e irreverente. Se fue Tony y lo vamos a extrañar.
Fuente: www.lanacion.com.ar