(*) Por Roberto Colmenarejo
¡Ya llegó la Primavera! Aunque el clima pareciera no querer darse por aludido aún, esta semana comenzó la más linda de las estaciones. La primavera es además la temporada oficial de los vinos rosados, productos jóvenes, livianos y frescos, para disfrutar de comidas al aire libre en los días cálidos que ya se avecinan.
Siguiendo la línea de proponer vinos de buena relación precio-calidad (que empezamos hace algunas semanas con notas sobre el Malbec y Cabernet Sauvignon), hoy les dejo siete sugerencias de rosados ricos con precio accesible:
Santa Silvia Rosado Dulce S/A ($25): A pesar de que ya casi no se encuentran vinos que merezcan una mención particular en este rango de precios, este juvenil rosado sanjuanino “cumple bastante” por el importe que por él se eroga. De aromas frutales directos, se le suma una boca etérea y veloz, con dulzor moderado y correcta acidez. Rosado simple y agradable, no se puede medir más…
Aconquija Syrah Rosado 2013 ($60): Otro producto sencillo y encantador para beber, aunque con mayor entidad, es este vino rosado elaborado con los mejores racimos de Syrah provenientes del Valle de Uco. Ofrece aromas frutales, balsámicos -anís, mentol- y algo especiados; sumados a una boca gustosa y liviana, de fresca acidez -típica de las zonas frías- y moderada permanencia. ¡Un rosado genial para la copa del aperitivo!
Callejón del Crimen Estate Sangiovese Rosé 2014 ($62): ¡Cómo me gusta descubrir estos vinos tan jóvenes, vivaces y únicos! Un rosado obtenido con una variedad bastante atípica en nuestras góndolas como es la Sangiovese. Vino de aromas frutales frescos y marcados trazos herbales; complementado con una boca de cuerpo medio y paso franco, donde repite sensaciones afrutadas, con jugosa acidez y persistencia media. Rosado diferente, de esos “que rompen el molde”.
Finca Las Nubes Rosado 2012 ($69): Un producto interesante, de silueta quizás más cercana a un vino tinto que a un rosado. Lo elabora José Luis Mounier en El Divisadero (Cafayate) con un ensamblaje de uvas Malbec y Cabernet Sauvignon. El resultado es un rosado oscuro e intenso, que deja entrever el ímpetu de los vinos norteños en sus aromas frutales maduros, especiados y algo terrosos. En la boca es voluminoso y lleno, fluido gracias a su calibrada acidez, con recuerdos de especias y una permanencia media-larga. Un rosado ideal para escoltar un asado en un mediodía de calor.
505 Vineyard Rosado 2013 ($72): Debo confesar que este es el estilo de rosado que más me agrada, sabroso pero netamente seco. Está vinificado por la bodega mendocina Casarena con un corte de uvas Malbec y Cabernet Franc. Un producto fragante, que combina en nariz reminiscencias frutales y especiadas. Al llevarlo a la boca es pleno y suculento, refrenda sensación de especias, con refrescante acidez y un largo post-gusto. ¡De esos rosados bien versátiles, que pueden maridar con una gran variedad de platos!
De Ángeles Malbec Rosado Dulce Natural 2014 ($72): Aquellos amantes de los vinos dulces estarán de parabienes con la novel cosecha de este rosado mendocino, de carácter goloso y destacada calidad. Un producto de aromática frutal diáfana; que se continúa en una boca apetitosa y suelta, con dulzor moderado, acidez correctamente balanceada y buena permanencia. ¡Mi elección en rosados para acompañar tartas o postres frutales!
Las Perdices Malbec Rosado 2013 ($77): Un rosado de Malbec admirable, podría decirse “de manual de enología”, con todos los atributos que uno espera de estos vinos. Seductora nariz de frutas rojas frescas (frutillas, frambuesas, ciruelas), matizada con suaves dejos herbáceos. Boca de entrada muy amable -aunque no dulce-, buen volumen, agilidad, frescura sostenida y notable persistencia para su rango. ¡Un rosado perfecto, hecho para gustar!
Y para ustedes, ¿cuáles son sus rosados favoritos?
(*)Sommelier y docente – [email protected]
Preguntá en Catar SRL y Vinoteca Dvino por estos vinos recomendados.